Querer 100% y ser querido al 50%.

Odio esa sensación de dar todo por alguien y que se alguien sólo dé la mitad. De que te digan 'te echo de menos' y que no hagan nada por verte cuando te recorrerías cielo y tierra por hacerlo. Es un dar el 100% y recibir la mitad que cansa. Es un pararte a pensar y decir ¿realmente merece la pena entregar todo a alguien y sentir que no hacen ni la mitad que tú? A lo mejor llegó la hora de cambiar y preocuparme un poco más por mí, de entregar menos y recibir más, ¿no? Yo creo que ya es hora.

Querida yo:

Escribo esto casi un año después de no tocar este blog. Mi vida ha dado un giro de 180º en este último año. El amor de mi vida, o el que yo creí que lo era, y yo hemos tomado caminos diferentes, ya ni nos miramos a la cara pero a veces me pongo a recordar y por qué no, a lo mejor él lo hace de vez en cuando, siempre nos quedaran los recuerdos y todo lo que vivimos, y si algo tengo claro es que no cambiara ninguno de ellos. La que era mi hermana desde los 3 años y yo casi ni nos hablamos, de ser hermanas hemos pasado a ser conocidas que se llevan bien, y me duele joder claro que me duele, pero para mí ella siempre sera especial y jamás olvidare todo lo que he vivido con ella y todo lo que la debo; jamás olvidare las risas, los llantos, las discusiones y las reconciliaciones porque he pasado los mejores momentos de mi vida al lado de ella y eso es algo imposible de olvidar. He conocido a muchísimos chicos, demasiados, y con ellos me he equivocado, he rectificado y he seguido avanzando. He cometido errores y también aciertos, he aprendido y puede que haya enseñado, he conocido a gente increíble y otra que no lo era tanto, he conocido gente nueva sí, pero también he dejado otra atrás, que puede que se lo mereciera y puede que no y que haya cometido errores muy grandes pero también puede que haya acertado. Se podría decir que estoy a gusto con mi vida y que aunque cambiaría algunas cosas no me arrepiento de absolutamente nada de lo que he hecho porque sino no hubiera llegado nunca hasta aquí. Tengo unos padres que me quieren y se preocupan por mí, una familia con sus más y sus menos pero a la que adoro más que a nada, tengo amigos que me quieren y a los que quiero y el mejor novio del mundo. Tengo problemas como todo el mundo, preocupaciones, discusiones, buenos momentos y otros no tan buenos pero he llegado a un  punto en mi vida en el que me encuentro feliz y de la que disfruto día a día. Supongo que la vida consiste en eso, ¿no? en avanzar, caerse, levantarse y seguir avanzando, porque la vida sigue y no va a parar por ti y dejaras a gente atrás con las que has vivido momentos inolvidables pero entrarán otras con las que vivirás momentos igual de inolvidables o mejores y lo único que queda es disfrutar de cada uno de ellos.

Me dio la vida y ese es el mejor regalo.

Probablemente esto no lo leas nunca pero te mereces esto y más. Eres el claro ejemplo de seguir para adelante cueste lo que cueste, de superación, valentía y lucha diaria. Pero sobretodo de sacarme adelante sin ayuda de nadie. Eres esa madre que me ha enseñado que antes que nada está la humildad y el portarse bien con la gente, que aquí el 'no puedo' no sirve de nada, que la vida está muy jodida y que si no soy yo nadie luchara por mí cuando ella ya no esté. Mi madre, que se desvive por darme la mejor vida que puede y me comprende. Que ha aguantado mis malos días, mis malas caras y hasta mis 'ojalá te mueras'. Me ha visto llorar diez mil veces por gente que no merecía la pena, me ha consolado y ha estado cuando nadie estuvo. Posiblemente pienses que no me importas demasiado, pero te aseguro que daría mi vida por ti. Sé que posiblemente no te lo diga mucho, pero te quiero muchísimo mamá.